Once amigos del pueblo de Navaluenga se reunieron en torno a una idea que les obsesionaba y que no podían permitir que ocurriera: que se perdieran los viejos y maravillosos viñedos del valle del alto Alberche. De esta manera comenzaron una aventura que empezó con elaboraciones artesanales en el “furrancho” o bodega, que culminaron con el fin de la construcción de la actual bodega en el año 2005.
El proyecto de la bodega Garnacha Alto Alberche consiste en hacer vinos que reflejen la personalidad de los distintos pagos que hay en el Valle del Alto Alberche con la variedad Garnacha. El proyecto nació con la idea de dar apoyo a todos los viticultores del Valle, para que sus viñedos no se perdieran ni se arrancaran, y por ello toda la uva con la que se elabora vino es comprada de momento. La edad de los viticultores nos obligará a comprar algún viñedo de máxima calidad para que no se pierda, pero lo que realmente se quiere, es demostrar a las nuevas generaciones que hay futuro en las garnachas del Valle, y que resurja el cuidado del campo de nuevo.
Nuestros viñedos son de suelos de arena de granito. Están situados entre 750 y 1.100 metros de altitud. Son viñedos viejos de más de 40 años, siendo la mayor superficie del viñedo de aproximadamente 60 años. Al estar nuestros viñedos situados en el Valle del Alto Alberche, podemos disfrutar de múltiples exposiciones y altitudes de los mismos, lo cual nos permite elegir el viñedo con máximo potencial para elaborar las garnachas con más personalidad del Valle.
Garnachas Alto Alberche dispone de bodega propia en la cual realiza unas elaboraciones esmeradas, respetando al máximo los distintos terror de los que provienen sus garnachas. De esta manera sus vinos están elaborados en pequeños depósitos de acero inoxidable con el fin de respetar al máximo la pureza del vino, y por ello sus vinos no son filtrados.
Los vinos de la bodega Garnacha Alto Alberche se llaman 7 Navas, ya que reflejan la personalidad de los viñedos del Valle de las 7 Navas.